Misión de Santa Rosa de Lima, 22 de febrero de 1756
- repensarmargenes
- 5 abr 2023
- 1 Min. de lectura
Habíamos estado caminando durante doce días pero el paisaje no dejaba de sorprenderme, habíamos avistado varios pueblos pero sin rastro de nuestra misión, muchos habíamos perdido la esperanza, pero tras muchas leguas caminadas, dimos con el asentamiento, aunque para nuestra desgracia estaba abandonado, solo quedaban los edificios, pero la iglesia estaba ruinosa, no supimos lo que había pasado hasta unas semanas después, cuando dimos con un pueblo habitado por guaraníes, que compartieron con nosotros lo ocurrido y nos dieron comida que nunca había probado, un pan llamado mbuyape llamó especialmente mi atención por su buen sabor, llevé con su permiso una cerámica con unos patrones nuevos para mí y que aún conservo a día de hoy.
Fernando Pintor

Comments